Tarántulas de México

Status de poblaciones en vida libre en el mundo, mercado ilegal
y acciones de conservación.

Las tarántulas son uno de los grupos animales menos estudiados en el mundo; si bien hay investigadores expertos en taxonomía, comportamiento, reproducción, venenos, etc, muy pocos o ninguno se han enfocado en el aspecto poblacional, por lo que no existen datos de tamaño poblacional de ninguna especie, actuales o pasados, ni tampoco datos duros sobre las consecuencias de los diversos impactos ambientales sobre sus poblaciones.

Lo único que se tiene son relatos hablados de grandes eventos reproductivos masivos de algunas especies que eran comunes hasta hace dos o tres décadas, pero que ahora ya no se han visto, por ejemplo Brachypelma smithi en Guerrero, Brachypelma klaasi en Jalisco, B. vagans en Quintana Roo, donde se narra la presencia de cientos, si no es que miles de tarántulas macho que invadían las carreteras, todas ellas en busca de alguna hembra receptiva. Es fácil suponer que si existía tal cantidad de machos, las hembras debían, al menos, ser la misma cantidad (si la proporción de sexos es 1:1). Estos eventos masivos ya no se presentan, al menos en la cuenca del Pacífico, aunque parece ser que en Quintana Roo y Yucatán aun es posible observarlo en algunas localidades.

Esta reducción en las poblaciones naturales de tarántulas se repite en muchas partes del mundo, y nos hemos dado cuenta de ello gracias al creciente interés por las tarántulas como mascotas. Las diversas asociaciones de gente interesada en las tarántulas del mundo han dado cuenta de la disminución de estos animales en su hábitat natural, coincidiendo todas ellas que las principales causas de esto son la pérdida y fragmentación del hábitat, el uso de pesticidas, agroquímicos y la contaminación, la extracción (tanto legal como ilegal) para el mercado de mascotas, el mercado de souvenirs para turistas, y el temor infundido que tiene la gente ante estos animales.

La combinación de estos cinco factores, aunado a una estrategia reproductiva poco exitosa bajo condiciones de estrés ambiental (reproducción anual, muchas crías pero altamente susceptibles a la depredación, largos períodos para alcanzar la madurez sexual, los machos solo son sexualmente activos durante una temporada) están llevando a la disminución de las poblaciones de tarántulas en todo el mundo.

Según algunos aficionados a las tarántulas, los sitios donde las tarántulas enfrentan mayores amenazas son aquellos de donde provienen las especies más populares y valiosas en el mercado de mascotas, pero que también son en su mayoría regiones de países pobres o en vías de desarrollo. Entre estos puntos críticos están:

Bosques Montañosos de Usambara, Tanzania.
Chile central.
Oeste de Ecuador
Zonas elevadas del Oeste del Amazonas.
Costa Atlántica de Brasil.
Suroeste de Costa de Marfil.
Oeste de la India
Sri Lanka
Malasia peninsular.
Filipinas.
Nueva Caledonia
Suroeste de Australia

En todas estas zonas habitan tarántulas altamente comercializadas, tanto aquellas que son muy populares como Grammostola rosea y G. porteri de Chile y las Usambara de Tanzania, como las cada vez mas raras Selenoscosmia de Australia y el género Poecilotheria de India y Sri Lanka.

Hablemos de cada uno de los impactos mencionados con anterioridad sobre algunas especies de tarántulas.

Este es tal vez la amenaza más importante que enfrentan las tarántulas, así como la mayoría de las plantas y animales de nuestro planeta. El crecimiento demográfico de la población humana, requiere cada vez de mayor espacio para construir hogares, mas sitios para obtener materiales y alimentos, mas infraestructura para obtener energía y mas medios de comunicación carretera; incluso gran superficie de hábitat selvático y otros tipos de vegetación se está perdiendo para obtener elementos inútiles pero con gran valor en el mercado como lo son los diamantes y el oro, en cuya explotación se destruye en Bolivia, Tanzania, Brasil, y muchos otros países una enorme superficie de hábitat natural y se generan contaminantes peligrosos.

En la India, un país con mas de 1080 millones de habitantes, 297 millones ha de superficie y una densidad de 363.3 hab/km2, el espacio se esta acabando cada vez con mayor rapidez, y mas ahora que el gobierno Indú ha trazado una meta de avanzar rápidamente en el aspecto económico. De acuerdo con el libro rojo de la IUCN (Unión Internacional para la Concervación de la Naturaleza) la pérdida y fragmentación del hábitat ha llevado a que las poblaciones de nueve especies de tarántulas del género Poecilotheria estén decreciendo rápidamente, dos de las cuales están en muy grave peligro de desaparecer, tres en peligro, y una vulnerable. Estas son las primeras tarántulas que se incluyen en esta lista.

Entre las más amenazadas están Poecilotheria metallica y P. hanumavilasumica, consideradas críticamente amenazadas pues su hábitat ha sido casi por completo destruido. La localidad donde se encuentra P. metallica es Andhra Pradesh, reserva forestal entre Nandyal y Giddalur, y según la IUCN (2009), esta zona esta bajo gran presión por las comunidades vecinas así como por insurgentes que usan la selva circundante para sus operaciones y subsistencia. Se asume que la superficie de hábitat ha decrecido con los años, pero hay definitivamente un declive en la calidad del hábitat para las tarántulas que buscan cavidades en los árboles más desarrollados y viejos. Esta especie está categorizada como en estado crítico debido a que su hábitat esta restringido a menos de 100 km2 en una sola localidad y continúa decayendo en su calidad. A esto hay que agregar la extracción para el mercado de mascotas, acción que en conjunto con la pérdida del hábitat puede resultar en la extinción de la especie en su hábitat natural en el futuro cercano.

P. hanumavilasumica esta también críticamente amenazada ya que ahora esta restringida a unos pocos árboles de tamarindo, casuarina, árboles de bosque deciduo y plantaciones de palmas de la Isla de Rameshwaram y la parte continental cercana a dicha isla. La especie parece tener ocho subpoblaciones y menos de 15 localidades severamente fragmentadas, entre las cuales no suman mas de 10 km2 aunque se espera que exista en al menos una superficie de 100 km2, sin embargo las aproximaciones de tamaño poblacional no calculan mas de 500 ejemplares.

La vegetación natural esta casi completamente perdida. Los ejemplares de una localidad fueron exterminados en 2006 cuando una plantación completa de tamarindos fue arrasada para la construcción de un edificio gubernamental, y otras dos para establecer infraestructura turística.

Al momento de correr un modelo de simulación, los investigadores Molur y Daniel, descubrieron que debido a que presentan una proporción de sexos desigual y la diferencia entre la madurez sexual entre machos y hembras, las poblaciones de menos de 5,000 individuos tienen una muy alta probabilidad de desaparecer dentro de las próximas tres o cuatro décadas, por lo que es poco probable que esta especie sobreviva en los próximos años. Aunque esta especie no se encuentra muy distribuida en el mercado de mascotas, unos pocos adultos y subadultos de ambos sexos han salido del país.

En 2004 Andrew Smith y Paul Carpenter de la British Tarantula Society (BTS) durante un viaje a la India, encontraron un sitio con una alta densidad de Poecilotheria hanumavilasumica, con 600 a 800 individuos por acre (esto es igual a 600 a 800 individuos por aproximadamente 4,000 m2). Ante esta alta densidad y siendo una especie rara con distribución muy limitada, Smith y Carpenter propusieron la creación del primer Santuario para esta conocida como Tarántula Tigre Hanumavilasum.

Sin embargo, a pesar de que la BTS obtuvo la aprobación de varias organizaciones británicas para proveer de fondos el proyecto, ninguna organización indú aceptó el dinero, con el argumento de que “no querían estar asociados con el dinero de sangre que esta en el corazón de todo pasatiempo u organización que esta relacionada a la colecta masiva, la venta y el mantenimiento de tarántulas” (Smith, 2004).

Afortunadamente una asociación Indú tomo el proyecto en sus manos y en conjunto con los habitantes de la plantación de tamarindos y del templo de Hanumavila donde se ubica esta pequeña población de P. hanumavilisca, tomaron a su cargo el cuidado de la zona, aunque cada vez es menor el interés por ella pues los jóvenes emigran de este lugar a las grandes ciudades en busca de trabajo, así que probablemente el proyecto morirá con el último habitante de la zona.

En todo el mundo se ha expandido la pasión por las tarántulas, existiendo una gran comunidad de personas que coleccionan tarántulas como mascotas. El interesante comportamiento, formas de vida, colores y hábitos, hacen de estos animales fascinantes mascotas, además que son animales que requieren un muy bajo mantenimiento y espacio, representando poco gasto para sus poseedores. Esto permite que una persona pueda tener gran cantidad de especimenes.

En algunos países existen incluso asociaciones de personas apasionadas por esta actividad, como Inglaterra, Estados Unidos, Alemania, Malasia, Francia, España, Italia y muchos más. Este creciente número de interesados en las tarántulas ha favorecido la extracción intensa de ejemplares de su medio ambiente, tanto de manera legal como ilegal.

En Europa, cada año durante las ferias de tarántulas, hay expositores que muestran ejemplares adultos de especies muy difíciles de encontrar como P. metallica y P. hanumavilasumica. Según ellos, estos ejemplares son criados en cautiverio, pero es poco probable que así sea; y aún si esto es cierto, los padres de dichos ejemplares debieron salir ilegalmente de su hábitat natural.

En un caso reciente, ingresaron a Alemania varios ejemplares silvestres de Poecilotheria, que salieron ilegalmente de la India pues el gobierno lo prohibe, sin embargo, dado que no están listados en CITES, la policía alemana no pudo hacer nada, pues la acción ilegal fue llevada a cabo en la India y no en Alemania.

De manera legal podemos citar el caso de las tarántulas chilenas de las cuales se exportan cada año desde Chile, miles de ejemplares adultos, subadultos y crías para los mercados de mascotas de todo el mundo. El precio de exportación por un ejemplar adulto es de solo 1.50 dólares por una Grammostola porteri o 2 dólares por una Grammostola rosea. En México, un ejemplar de Grammostola rosea adulto esta en un precio medio de 200 pesos en tiendas de mascotas de renombre, lo que resulta un precio muy económico para una tarántula adulta y a la vez grandes ganancias para los vendedores.

Según la información recabada, en Chile existen 3 o 4 exportadores regulares de tarántulas para su venta en el mercado internacional de mascotas, habiendo solo uno que lo hace a gran escala (más de mil ejemplares por vez). Muchas de las especies que se comercializan no están ni siquiera descritas formalmente para la ciencia, así que los proveedores las identifican como “sp” o por la localidad de donde son obtenidas o el color dominante. Entre las especies chilenas explotadas para el mercado de mascotas están: Grammostola rosea, G. porteri, Grammostola sp “norte de Chile”, Grammostola sp “Sur de Chile”, Thrixopelma pruriens, Paraphysa scrofa, P. parvula, 5 Paraphysa sp, Euthalus truculentus, E. vulpinus, E. pulcherrimaklaasi (formas verde y azul), 3 Euthalus sp, Acanthognathus francki, A. pissi, A. recinto, A. vilches y Acanthognathus sp.

Sorprendentemente, y según la información recabada, algunas de estas especies (G. porteri principalmente), no presentan una disminución en su población, permaneciendo ésta estable e incluso aumentado. Aquí al parecer el ser humano ha sido factor determinante para el aumento de la población de tarántulas, eliminando o alejando a los depredadores naturales (reptiles, aves, mamíferos), con lo que mayor número de spiderlings llegan a formar nidos, generalmente cerca del nido donde esta la madre, lo que indica un alto grado de adaptación a un medio ambiente impactado, sacando ventaja de la situación.

A modo de ejemplo, según algunos aracnólogos aficionados, en un bosque esclerófilo central típico Chileno, existe una media de un nido de Grammostola por cada 50 metros. En áreas con un alto impacto antropogénico (cazadores frecuentes, ciclismo de montaña, motociclismo, etc.) se han encontrado colonias en las cuales sus poblaciones se encuentran hasta de 3-4 nidos por metro cuadrado.

Esta es una observación personal de alguien inmerso en el medio aracnológico, aunque acepta que no existen los estudios poblacionales que permitan comparar el tamaño de las poblaciones antes y después de su explotación intensiva de G. porteri. También valdría la pena preguntarse si la misma situación de abundancia y de adaptación a un medio ambiente impactado se presenta para el resto de las especies exportadas, como Euthalus pulcherrimaklaasi, que es considerada una especie rara.

De acuerdo con un reporte publicado por la USAID en abril de 2008, en la Guyana, el gobierno ha establecido cuotas de exportación para la flora y fauna silvestres. Para el caso de las tarántulas, en 2007 la cuota para Avicularia avicularia era de 20000 ejemplares, habiéndose sacado 18,509; para Theraphosa blondi la cuota permitida era de 2500 ejemplares, habiéndose exportado 1584, y para Ephebopus murinus la cuota establecida era de 2500 y se exportaron 555 individuos. El método para el establecimiento de las cuotas es sin embargo puramente improvisado, ya que no existen estudios que permitan calcular con precisión una tasa de explotación sustentable. De acuerdo con este reporte, otras especies animales que cuentan con cuotas de extracción han sido casi por completo exterminadas, como el Arapaima y las tortugas de río. ¿Estará sucediendo lo mismo con las tarántulas?, no lo sabemos.

En Australia, muchas especies de Teraphosidos son populares mascotas. Desafortunadamente, mientras que muchas de las especies más populares como la mexicana rodillas rojas (Brachypelma smithi) son criadas en cautiverio, una parte sustancial del mercado (en muchas ocasiones ilegal) se presenta con especies capturadas en su medio ambiente natural, especialmente las especies raras e inusuales por ejemplo del género Selenoscosmia.

Muchos Teraphosidos presentan rangos de distribución limitados, y están severamente amenazados por el mercado de mascotas, debido a esto, según algunos aracnólogos australianos, algunas especies Australianas se han extinguido de su medio ambiente natural. Esto es especialmente trágico ya que algunas de estas especies permanecen sin describir taxonómicamente, por lo que se ha convertido en una carrera contra el tiempo para identificar estas especies antes de que se pierdan para siempre.

Aquí es de todos sabido que teniendo el dinero se puede conseguir prácticamente cualquier animal que se desee. Basta ir al mercado de Sonora en la Cd. de México, entrar en el área de animales y preguntar a los vendedores para poder conseguir desde una tarántula hasta un lince, puma o jaguar. Las tarántulas rondan los 200 pesos por ejemplar, precio significativamente mas bajo que el que se puede obtener por un ejemplar que ha sido criado en cautiverio. Además de los mercados, algunos ejemplares se comercializan por Internet, en sitios de subastas en línea, donde eventualmente hay vendedores que ofrecen adultos de Brachypelma en 200 o 300 pesos. Evidentemente esos ejemplares son ilegales, puesto que ninguna de las UMAs registradas en México vende ejemplares adultos, además de que el precio es muy bajo para ser ejemplar de cautiverio, y aun mas si fuese importado. Afortunadamente la cantidad de personas que deciden adquirir un ejemplar ilegal contra uno legal es cada vez más baja.

Alemania es un caso especial, no por poseer una gran cantidad de especies de tarántulas, sino por tener una gran cantidad de recolectores ilegales. Por alguna razón, son ciudadanos alemanes quienes con mayor frecuencia son atrapados por la policía en posesión de tarántulas capturadas ilegalmente, estos son algunos casos:

En 2003 un decomiso en Alemania llevaba 500 ejemplares.

En 2004 fue capturada en Frankfurt una ciudadana francesa con 1099 Brachypelma procedentes de México.

El jueves 2 de Octubre de 2008, en el Aeropuerto de Quito se capturó a un ciudadano alemán que pretendía llevarse 741 tarántulas a su país natal, según dijo, sin conocer que están protegidos.

Otro mercado para las tarántulas es el de recuerdos o souvenirs. En la Guyana Francesa se capturan y matan cientos de tarántulas Goliat (Theraphosa blondi) para venderlas enmarcadas en un cuadro o insertas en resina. Estos animales son ofrecidos a los turistas en locales bien establecidos, por lo que no parece que su comercio fuese ilegal, sin embargo lo es, y los turistas son sorprendidos al llegar al aeropuerto y ver que sus “recuerdos” son decomisados por la policía y ellos tienen que sufrir un proceso penal o administrativo. En 1998, Rick West convenció a Nacional Geographic para hacer un reportaje sobre esta tarántula y de allí surgen estas imágenes.

En algunos lugares del mundo las tarántulas aún forman parte de la alimentación de las personas. Pero en ningún lado son tan populares como en Camboya, donde los lugareños consumen tarántulas como si fueran pequeñas botanas. Esta costumbre surgió durante la dictadura de Pol Poot, en los años 70, cuando las restricciones alimentarias a la población fueron extremas, así que la gente tuvo que tomar acciones desesperadas, entre ellas la necesidad de cazar y comer tarántulas, cosa que ya constituye una costumbre, pues son ofrecidas por las mujeres y niños a las orillas de la carretera, encontrando una gran cantidad de clientes, a quienes le venden una tarántula por 300 riels (unos 8 centavos de dólar) frita en ajo y sal. Una sola persona puede vender entre 100 y 200 tarántulas en un buen día.

¿Cual es el efecto de esta alta extracción de tarántulas para fines alimenticios?, no se sabe, pero al observar la gran cantidad que un solo vendedor lleva en su canasta, y esto se repite diariamente, parecería ser que el recurso no les durará por mucho tiempo.

Dado que el principal impacto sobre las poblaciones naturales de tarántulas es la fragmentación y destrucción del hábitat, la mejor y principal acción de conservación que se debe llevar a cabo es la conservación y/o restauración de éste.

En diversos estudios se ha concluido que la selva es mas valiosa en su estado natural (pudiendo dar un uso continuo a sus recursos) que cuando es deforestada para usar sus recursos una sola ocasión.Por ejemplo, una hectárea de selva amazónica tiene un valor de 6820 dólares si es sustentablemente utilizada (recolectando frutas, latex y madera); y solo de 1000 dólares si es deforestada para obtener madera, y de solo 148 dólares si es usada para ganado.

De esta forma Brasil ha establecido una amplia red de zonas protegidas que abarca dos millones de kilómetros cuadrados, y ha establecido nuevas formas de vigilancia, de tal forma que de 2002 a 2006 se ha reducido la tasa de deforestación en mas de 60%.

Esto ha sido ganado a través de los esfuerzos de muchas personas e instituciones, pero también con la muerte de algunos activistas como Wilson Pinheiro y Chico Mendes que fueron asesinados por rancheros locales.

En India por ejemplo se están llevando a cabo reforestaciones intensivas de zonas alteradas, sin embargo, parece ser tarde para muchas especies animales, cuyo ciclo de vida es más corto que la tasa de recuperación de un bosque o una selva, tal es el caso del género Poecilotheria, que requiere de árboles adultos para establecer sus refugios, y que difícilmente obtendrán los beneficios de la reforestación. A ello debemos agregar el hecho de que no son un animal apreciado por la gente local, así que son eliminadas tan pronto son vistas. Aquí resulta curioso que a nadie en la India se le haya ocurrido criar las especies nativas en cautiverio o semicautiverio, o hacer una extracción controlada de estos animales con cuotas fijas basadas en estudios poblacionales y de capacidad de carga.

Otros gobiernos como el de Guyana, están protegiendo sus selvas, con el conocimiento de que son un recurso valioso del cual se puede obtener un beneficio económico. La regulación de la explotación de la flora y fauna mediante el establecimiento de cuotas de exportación es una buena herramienta, sin embargo esto no evita que se siga presentando el tráfico ilegal de animales, pues los impuestos y trámites aduanales encarecen el producto, siendo mucho más lucrativo hacerlo de manera ilegal. Además, para las tarántulas no existen los estudios que sustenten el número máximo de ejemplares que se pueden extraer sin poner en riesgo sus poblaciones.

En México las UMA’s "Tarántulas de México" en Guadalajara y "Aracnofilia" en Cancún, están llevando a cabo un intenso programa de reproducción del género Brachypelma, incluyendo a todas las especies presentes en el país. Entre los objetivos esta la reintroducción y repoblación de tarántulas en sitios clave, de hecho, hemos logrado obtener un permiso para colectar material parental de Brachypelma baumgarteni, con la promesa de liberar el 30% de las crías producidas. Esperando que esto ayude para la conservación de especies con distribución limitada como es el caso de B. baumgarteni.

Adicionalmente, Rodrigo Orozco de "Tarántulas de México" quiere que sus tarántulas sean vendidas en los mercados que tradicionalmente venden animales ilegales, como el de Sonora en la Cd. de México. Los precios evidentemente deberán ser competitivos con los que actualmente se manejan en ese mercado, lo cual desalentaría a los recolectores ilegales. Esto sin embargo es un arma de dos filos, pues podría darse el caso de que tarántulas legales sean mezcladas con tarántulas ilegales, y así obtener mayores ganancias. Rodrigo esta buscando los candados que permitan evitar o al menos reducir la posibilidad de que esto suceda.}

De acuerdo con la Universidad de Michigan, las acciones que se deben tomar para la protección y conservación de las tarántulas son:

Contra el mercado ilegal y la sobre-explotación de las tarántulas como recurso alimenticio o material de souvenirs, la mejor acción que se puede tomar es la crianza intensiva en cautiverio. Al criar estos animales en cautiverio en cantidades suficientes, se disminuirán los precios internacionales, en respuesta a la alta oferta, lo que hará que la recolección ilegal sea en un momento, una actividad poco lucrativa.

Muchos países al ver que sus recursos naturales estaban siendo mermados de manera importante, iniciaron con el establecimiento de normas, reglamentos y leyes para protegerlos. Sin embargo, este mercado era tan importante, que no bastaba con las regulaciones internas que cada país había establecido, y por ello nació en 1975 la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna Silvestre (CITES), firmada inicialmente por 80 países, y actualmente cuenta con 175 paises.

Aun así, se sigue comercializando ilegalmente con flora y fauna silvestre, ya sea con animales vivos, productos o subproductos, incluso los precios han amentado considerablemente debido al riesgo que representa para los cazadores, transportistas y vendedores conseguir un animal que esta incluido en CITES, particularmente los del apéndice I.

Algunos grupos de animales no están incluidos en CITES, ni en la legislación ambiental de muchos países, tal es el caso de las tarántulas debido a la creencia de que son animales peligrosos y por tanto no son deseables, o porque no son ecológicamente importantes, o simplemente porque no son animales carismáticos como el delfín, el oso panda, y otros.